Apocalipsis Capítulo Cuatro (Parte 2) MP3 - William Marrion Branham
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Cita del Mensaje de William Marrion Branham:
Un pacto siempre es hecho por medio de un juramento, así que no hay nadie ... Uds. juran por alguien mayor que Uds.; juran por su madre, juran por su nación, juran por algo, juran por Dios. Pero Uds. no pueden jurar a menos que haya alguien mayor que Uds.
Y no había nadie mayor que Dios, así que El mismo juró, por Sí mismo. ¡Amén! Jurando por Sí mismo que El confirmaría este pacto. Amén. ¡Oh! ¡Fuiu! Juró por eso, que El "preservaría la Simiente de Abraham". ¿Qué es la Simiente de Abraham para el Gentil? El bautismo del Espíritu Santo, la Simiente de Abraham. Juró por Sí mismo: "Los resucitaré, a cada uno. Les daré Vida Eterna y los colocaré aquí de nuevo sobre la tierra". De qué tenemos que apur-. . que pensar.
Así que lo vemos a El en el arco circular de color verde ámbar. Este verdoso, ¿qué representa el verde? Vida. El verde es siempre verde, siempre permanece verde, es vida. ¿Qué significa? Que Dios ha prometido, así como juró allá en Génesis, que El ya no ... puso el arco iris en el cielo, que El "ya no destruiría este mundo por agua". El también hace Su juramento y jura por Sí mismo que El resucitaría a toda la Simiente de Abraham, y este mundo será sometido a todo su juicio estremecedor. Los juicios que vamos a ver en las lecciones futuras que vienen, les mostrará que este mundo va a vomitar y se volverá volcánico, y estallará en pedazos, y estará patas arriba y todo. Pero El juró por Sí mismo que El no lo destruirá, sino que El lo allanará de nuevo y pondrá a Sus Hijos en la tierra para ese Milenio. ¡Oh, hermano! Estoy vigilando por la venida de ese feliz día Milenial. Cuando nuestro bendito Señor vendrá y arrebatará a Su Novia que espera; ¡Oh! Mi corazón está anhelando, clamando por ese día de dulce liberación, Cuando nuestro Salvador volverá a la tierra otra vez.
Oh, cómo estamos anhelando ver ese Día, El prometió que el gran Milenio vendría. Y otra cosa, la razón por la cual El fue rodeado, El es un Dios cumplidor de pactos. ¡El cumplirá Su pacto!
Ahora veamos el siguiente versículo, de todas maneras. Oh, queremos ver uno más, y tenemos más o menos de diez a quince minutos para hacerlo. ¿Están demasiado cansados? [La congregación dice: "No".-Editor] ¿Quieren seguir adelante? ["¡Amén!"] Muy bien, tomemos el versículo 4: Y en derredor del trono había veinticuatro tronos; y vi sentados en los tronos a veinticuatro ancianos, vestidos con ropas blancas, con coronas de oro en sus cabezas.
Quizás no lleguemos hasta el final de ese versículo, pero comencemos el versículo cuatro. Miren ahora, cuando Juan lo vio a El, con ese color esmeralda alrededor de El, vimos todos los colores, los arco iris, y demás, y de qué se trataba todo. Ahora en el versículo 4, la primer cosa de la cual habla él aquí, en el versículo 4: Y en derredor del trono...
¡Observen! Es un cuadro tan hermoso aquí, no fallen en verlo, "el Trono".
Uds. saben, regresemos a Moisés. Moisés ... No tenemos tiempo para buscarlo, así que Uds. solamente acepten lo que les estoy diciendo. Moisés, cuando a él se le dio una visión arriba en el Monte Sinaí...
Yo quiero que Uds. se fijen que éste ya no era un Trono de gracia. Allí, la sangre había desaparecido, y el sacrificio había regresado de nuevo y ellos habían sido aceptados, y la sangre ya no estaba en el propiciatorio. Y era ahora un tribunal, porque truenos y relámpagos salían de él. ¿Es correcto eso?
Recuerden, fue como en el Monte Sinaí. Cuando Moisés subió al Monte Sinaí, ¿qué sucedió? Truenos, relámpagos. Y aun si una vaca o un becerro o una oveja, o cualquiera, aun tocaba el monte, tenía que morir. La Biblia dice: "Tan grande fue el temblor que aun Moisés se espantó". Y Moisés ... Dijo: "Quítate tu calzado aquí, tú estás en tierra Santa". Josué el gran guerrero, que había de llevar a los hijos al otro lado y dividiría su herencia, solamente podía subir hasta la mitad del monte.
Ahí estaba de pie Moisés allí arriba con los colores de Dios, con destellos y relámpagos y esmeraldas alrededor de él, viendo esos mandamientos ser escritos. Estando en la Presencia de Dios, esa Voz hablaba: "Moisés, ¿dónde estás? Quítate tu calzado, tú estás en tierra Santa".
Un tribunal, era ahora, nada podía pararse allí sino los redimidos. Un pecador no podía acercársela en lo absoluto (había terminado), el tribunal. Muy bien.
Ahora, Moisés hizo cosas sobre la tierra, hizo el tabernáculo, como las cosas que él vio en el Cielo. Nosotros sabemos eso, ¿no es así? Nos damos cuenta que Pablo hizo la misma cosa. Debe haber ... Hebreos 9:23, que Moisés hizo las cosas así como las hizo. Y Pablo en su visión cuando él subió al Cielo, cuando él enseñó ese gran Libro de Hebreos, él debe haber visto en su visión la misma cosa que vio Moisés, porque él lo dijo, él enseñó ese maravilloso Libro de Hebreos, cómo ese Cristianismo era el ante tipo del Antiguo Testamento. El era un gran maestro, Pablo lo fue. Ahora, ese era Su Trono entonces. Entonces en el...
Terminemos esto. No puedo ... Yo iba a pasar por alto esto, pero no puedo hacerlo. ¿Dónde está el piza-. . .? ¿Te lo llevaste para atrás? ¿Está atrás, Doc? Bueno, quizás yo pueda hacer que lo vean desde aquí. Yo-yo ... Ahora, miren, tomen sus lápices y papeles, porque quiero decir algo aquí. Yo-yo estaba sentado esta mañana, algo vino a mí. Ahora les diré lo que hice, si Uds. se fijan, yo lo tengo dibujado aquí en la parte de atrás. ¿Ven? Lo dibujé así como me lo dio el Espíritu, ¿ven?, lo dibujé aquí como iba a ser. Pero yo-yo quiero decir algo aquí mismo.
Ahora, Dios, cuando El se coloca en el trono, entonces El es Juez. ¿Es correcto eso? ¿Cuándo juzgan los jueces? Cuando el viene a su tribunal, un trono. Ahora, yo quiero que observen cómo se hizo en el Antiguo Testamento, cómo fueron hechos los atrios al irse acercando a Su trono, y cómo lo vio Juan aquí. No vamos a llegar a ello esta mañana, a todo. Pero cómo vio Juan los mismos atrios del acercamiento a El, y cuál es el acercamiento a Su atrio. Ahora, oh, yo amo esto.
Ahora, en el Antiguo Testamento, había lo que era llamado la "congregación", donde el pueblo se congregaba. Lo primero, antes de que entraran, la congregación. Para entrar allí, ellos tenían que venir bajo la sangre derramada, atrios exteriores. Primero ellos entraban a las aguas de purificación, donde la vaca alazana era matada y hacían aguas de purificación. Ese es el pecador que viene y escucha la Palabra.
Así es como este gran rabí Judío acaba de ser traído al Señor, me oyó predicar sobre eso allá en-en Tulsa. En Tulsa, ¿no es así? En Tulsa, Oklahoma. Y él vino allí, era sólo un espectador. Y él fue después del servicio, él dijo: "¡Yo sé!" Dijo ... El es uno de los siete rabíes sobresalientes del mundo. Y él vino allí, dijo: "Yo quiero ver lo que esos Hombres Cristianos de Negocios. . . " El los llamó "Pentecostales". "Yo quiero ir allí y sentarme y escuchar".
Y cuando el Señor me hizo hablar sobre ese sacrificio de la vaca alazana, después del servicio, él se encontró con algunos de los hermanos allí atrás, dijo: "Yo quiero conocer al hombre. Yo sé que él ni siquiera ha tenido educación pero. . . " Dijo: "Yo soy un rabí Judío que conozco todos esos diferentes acercamientos y cosas como ésas", dijo, "yo nunca había visto eso en toda mi vida". Dijo: "Yo nunca lo había visto".
Y ahora él es un rabí Pentecostal, lleno del Espíritu Santo, yendo a todas partes, predicando el Evangelio. El se llama a así mismo: "Rabí Pentecostal". El fue al Hotel Washington Youree, el otro día cuando nos reunimos allá en la casa del Hermano Jack, y la señora lo conocía, ella dijo: "Rabí", dijo ella, "le tenemos un buen cuarto, pero", dijo, "no tenemos televisión".
El dijo: "¡Esas cosas son visiones del infierno', échelas fuera! Yo no las quiero allí, de todas maneras; ... hizo, yo haría que Ud. la echara fuera". Ella dijo: "¡Rabí!" El di o: "Yo soy un rabí Pentecostal". ¡Aleluya!
Dijo: "Ahora, cuando Ud. vaya a Israel, Hermano Branham, yo quiero ir con Ud." Dijo: "Nosotros podemos llevárselo a nuestro pueblo".
Yo dije: "Ahora no, rabí, ahora no. Ahora no, aún no es la hora, espere un poquito".
Ahora fíjense en estos lugares santos. Ahora, cuando uno entra a los atrios, lo primero eran los atrios, los atrios exteriores. Lo siguiente era el altar, donde los sacrificios eran ofrecidos, el altar de bronce. Luego afuera del altar de bronce, había un velo colgado allí que entraba al lugar Santísimo; allí adentro estaba el propiciatorio, allí estaban los Querubines. A eso es a lo que yo quiero llegar en nuestra siguiente lección, a esos Querubines que cubren el propiciatorio. ¡Oh, hermano! Yo ... Podríamos permanecer todo el mes en eso, ¿ven?, en ese Querubín.
Ahora, ahora fíjense cuando ellos entraban. La congregación podía llegar allí; los sacerdotes podían pararse aquí; pero solamente el sumo sacerdote podía entrar allí, una vez al año, llevando la sangre con él.
Y él tenía que estar vestido de cierta manera, cierto vestido; tenía que tener una campana y una granada, una unida a la otra. Y cuando él caminaba, él tenía que caminar de cierta manera. Y a medida que él caminaba, el tocaba: "Santo, santo, santo, al Señor. Santo, santo, santo, al Señor", esas campanas y granadas sonaban juntas, "¡Santo, santo, santo!" ¿Por qué? El estaba acercándose a Dios, teniendo la sangre del pacto en sus manos, yendo ante El, llevando la sangre.
Ungido (¡Oh, hermano!), con ciertos perfumes. Sus vestidos tenían que ser hechos por manos llenas del Espíritu Santo, manos certificadas hacen sus ropas. La rosa de Sarón, el aceite de la unción, lo derramaban sobre su cabeza, corría por su barba y luego sobre su ser, con el perfume real; una granada y una campana; tomando la sangre de un cordero inocente; y él no se atrevía acercarse a ese velo afuera ... él moriría allí mismo donde estaba parado. Así que él tenía que ir, caminando de cierta manera: "Santo, santo, santo, al Señor. Santo, santo, santo", (acercándose a Dios), "al Señor. ¡Santo, santo, santo!"
Y él iba allí y ofrecía la sangre sobre el propiciatorio, una vez al año. Y mientras él estaba allí adentro, él tenía el privilegio de ver la Gloria "Shekinah", cuando la Columna de Fuego, la Luz esmeralda que descendía, que guió a los hijos fuera de Israel. El hasta llenó de humo el templo para que nadie pudiera verlo. La Gloria del Señor caía hasta que estaba todo lleno de humo. Y El mismo entraba, entraba detrás del velo y se asentaba en el propiciatorio en el lugar Santísimo. "El lugar más Santo", es llamado, el lugar Santísimo. Y él tenía que estar vestido de cierta manera, caminar de cierta manera, estar ungido de cierta manera. El era una persona especial para entrar allí. ¡Cómo debe haberío envidiado la congregación!
Escuche tambien el Mensaje Apocalipsis Capítulo Cuatro (Parte 1) MP3
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